domingo, 6 de febrero de 2011

El fin de los tiranos


La crisis en Egipto, que al día de hoy deja unas centenas de muertes, es a la vez una muestra al mundo, que ha llegado el fin de los tiranos, la gente está canzada de regímenes opresores, como suele ocurrir en Medio Oriente y tambien en Cuba o Venezuela.

Los gobiernos tiranos son a la larga vomitados por su pueblo quienes cansados de tanta opresión se revelan y a costa de tantas vidas obtienen su libertad, tal es el caso de Hosni Mubarak, un hombre que tomó el poder en Egipto hace treinta años y se negó a dejarlo a costa del hambre y la pobreza de su pueblo.

Cuando asesinaron a Sadat, Mubarak lo sucedió y de inmediato instauró el Estado de Sitio que dura hasta hoy, y que le permite censurar todas las publicaciones, publicidades, correo, teléfonos e Internet, exigir permiso para todas las manifestaciones de protesta, retener y encarcelar individuos sin juicio o acusar disidentes políticos en juicios secretos.

Mubarak ha sufrido seis intentos de asesinato y ha cumplido seis períodos presidenciales, durante los cuales ha reprimido violentamente las protestas opositoras. El récord más desfavorable es el social: la mitad de los egipcios vive con menos de dos dólares al día, 30% está desempleado y el 7% de los niños no va al colegio por su pobreza.

Mientras las protestas arden, se dice que el decrépito gobernante se ha refugiado en el lujoso centro vacacional del Sharm el Sheik. Los medios estiman su fortuna entre US$ 25 mil y 40 mil millones.

Estos sujetos deberían pagar con largos años de cárcel el haber oprimido a una nación durante tantos años y habiendo utilizado para tal fin las artimañas del poder para doblegar la voluntad de la gente, como lo hace Chavez en Venezuela, Fidel Castro en Cuba y como tuvo un intento Nestor Kirchner en Argentina, son todos una muestra de la misma moneda.

Utilizan civiles para reprimir todo intento de golpe de estado, pero detrás de esos civiles hay gente preparada y pagada por el estado quienes son utilizados como fuerzas de choque por el mismo gobierno, lo mismo pasa en Venezuela y también tuvo su intento frustrado Kirchner en Argentina.

Las fuerzas de choque, que son civiles contra civiles deberían tener una pena mayor que la utilización de fuerzas militares, porque es instigar al pueblo a una guerra civil que es mucho más sangrienta e injusta y suscita odios interminables, porque un grupo dice ser partidario del gobierno y se muestra como gente que simpatiza con el poder; pero no es ni más ni menos que personas que reciben un beneficio de parte del estado para dicha función.

En Argentina, el kirchnerismo, en su momento intentó hacer uso de ese método, ejemplo Luis Delía, el piquetero quien decía que a la "democracia" si es necesario había que defenderla en las calles, dando a entender que estaban dispuestos a pelear por la permanencia de Kirchner en el poder. También esta el ejemplo de los barras bravas que se utilizaron en la feria del libro para insultar a los escritores contrarios al gobierno, los grupos de Moyano, son fuerzas de choque pagas para intimidar y provocar desmanes.

Ese método en Argentina fue perdiendo poder, el periodismo se encargó de desenmascararlo y la muerte de Ferreyra, el joven militante muerto de un tiro por fuerzas de choque del Ferrocarril Roca terminaron con Nestor Kirchner en la tumba y junto a él sus aspiraciones de perpetuarse en el poder a lo Mubarak.

Venezuela aún tiene su propio Mubarak, Chavez se hace fuerte y no tiene intención de transferir el poder, con la escusa a lo Mubarak de: "Sin mi es el caos" no hace más que producir el verdadero caos hasta que la gente un día se canse y pase lo que está pasando hoy en Egipto.

Lo que pasa en Egipto hoy, es un ejemplo de que no existe el hombre salvador, si existe el hombre opresor, manipulador, ambicioso y cruel; que prefiere darse un baño de sangre de la misma gente que está gobernando, antes que renunciar a sus aspiraciones egoístas y opresoras.