martes, 20 de marzo de 2012

El inexplicable odio a los judios


Francia, brutal ataque
Sucedió en un colegio judío de Toulouse. Un hombre en una moto disparó a quemarropa contra un profesor de religión, que estaba en la puerta con sus hijos de 6 y 3 años. Otra alumna también murió. Refuerzan la seguridad en sinagogas.
¿Alguien puede explicar el odio irracional? Mucha gente odia a los judíos y ni siquiera conocen su historia,sus costumbres, religión etc. Solamente alimentan sentimientos que otros se han ocupado en propagar, claro que es más fácil odiar que amar. Amar requiere compromiso en cambio odiar es hacer simplemente lo que hacen todos.

Las personas odian porque carecen de personalidad, no tienen ideas propias, ni piensan por si mismas,escuchan lo que todos dicen y hacen lo mismo sin pensar el daño que se hace.
Muchas personas jamás se han cruzado con un judío y sin embargo, lo primero que dicen es algo despectivo contra ellos y así van inculcando en sus hijos el odio irracional hacia una comunidad que es totalmente indefensa en nuestro país como en muchos otros lugares del mundo.

Los judíos han aportado mucho a la cultura del mundo moderno, de ellos proviene la Biblia y sus escritos antiguos, Jesús era judío y de él nace el cristianismo que ha traído consuelo a millones y millones de corazones destruidos en el mundo entero.
Los problemas que ocurren en Medio Oriente es netamente problema de ellos y viene aconteciendo desde hace miles de años. Nosotros debemos ser solidarios con las comunidades que vienen a nuestro país en busca de paz, y no ser tan perversos para transformar su situación en un verdadero caos, tomando partido en cosas que ni siquiera entendemos.

Es necesario tener en cuenta que todas las divisiones que hay en el mundo, sea de izquierda o derecha, sea racismo u otra cosa; provienen de intereses mezquinos y políticos que los grandes poderes se ocupan de difundir por el mundo, y mucha gente toma partido de un lado o del otro sin siquiera saber de que se trata. No esta mal que tomemos partido, opinemos u otra cosa; pero no nos hagamos irracionales, odiar por odiar, despreciar por despreciar no le hace bien a nadie, ni siquiera a nosotros mismos.


Lo peor es que mucha gente vive inculcando a sus hijos, el odio, el racismo, la intolerancia, sin saber siquiera como reaccionaran ellos el día de mañana, si terminaran poniendo una bomba o teniendo solidaridad con el prójimo.