martes, 22 de enero de 2013

Sin un adiós ni un porque


Te fuiste y nunca lo sabré, ahogaste mi alegría en pena

Trocaste mis delicias en lágrimas y gemidos

Y nunca lo sabré, si fue temor, o desconfianza

O simplemente tu amor se transformó en olvido.


Fue triste para mi y lo sufrí 

Por  no saber la razón de tan brusca partida 

Te fuiste sin adiós, sin penas y aún sin despedida 

Y dejaste mi corazón roto, y sangrante mi herida.


Te amé y no se si hice bien o mal

Si dije algo y te dolió, o simplemente fue un adiós y nada más

Sin más que reclamar, sin más que recordar

Solo esperar en la osada lejanía un sueño ausente que no volverá jamás.