miércoles, 10 de junio de 2020

La tiranía y el paredón

Suenan fusiles de pólvora blanca, se oye en la noche los gritos ahogados

El tribunal no dispuso su muerte, pero el pelotón lo envolvió en sábanas limpias.

Una de tantas fatídicas noches donde los cuerpos desfilan en frías mudanzas

Es que detrás del silencio callado, se esconde la muerte con fusiles cargados

Todo es oscuro, mientras el mundo resguarda su vida detrás de cortinas de tela tallada

La tiranía dispuso la muerte, el mundo entero en el paredón aguarda el fatal desenlace

Es que los fusiles disparan al azar, a unos les toca vivir, a otros morir y a otros escapar

La noche desciende como un velo que oscurece el firmamento, la tiraría ajusta su filo

¿No son estos sus uniformes de gala? ¿Colmados de medallas de plata, ni de brillo escarlata?

Blanca es la muerte, tibia la recepción, los pelotones de muerte un cómodo colchón

La excusa es la vida, la muerte una elección, en adornadas cárceles se espera la cruel decisión

¿A quien le tocará esta noche? Es el murmullo mudo que transita en la soledad del mundo

Los tiranos no visten sus trajes de gala, solo muestran atuendos color pureza

Pero la intención los vende, sus garras azules de alta élite se deslizan entre las sombras

Reflejando el blanco resplandor de sus guardapolvos que ocultos en su cuartel se ríen

Esbozando sonrisas pues sus carcajadas sedientas de poder se disimulan, para no inundar los largos

laberintos de los mundos cuyos corredores son como favelas que se hacinan de la interminable espera

Ellos lo crearon y soltaron su fiera para que la humanidad se esconda resguardada detrás de un barbijo..!