Muchos hoy quieren ser artistas, y para dicho fin utilizan cualquier recurso; pero Sandro fue el ejemplo de un artista de verdad, hasta el último minuto de su vida le dio a su público lo mejor de el, aún en el dolor y la enfermedad no dejó de demostrar la gran persona que era, al contrario de muchos que quieren ser artistas y lo único que brindan son escándalos, y dejan una pobre imagen de sus personas.
Sandro extrajo lo mejor de el para su gente que siempre lo siguió y para todo el público argentino,
entregó su vida para lo que el quiso hacer, el arte de ser un artista de verdad.
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